Fidelidad Alegre a la Vocación Misionera | La Comunidad de los Adultos Mayores de Pance

“Tratemos con amor y respeto a los ancianos y a los que han gastado ya su vida en el servicio de Dios, y deseemos enriquecernos con su experiencia. Y ellos procuren dar siempre testimonio de una perenne juventud de corazón. Amemos a todos de una manera especial a los hermanos enfermos, como miembros de Cristo paciente, visitándoles y asistiéndoles de buen grado” (Constitución Claretiana #18).

El 26 de Octubre de 2025 se realizó la Visita Fraterna Provincial a la Comunidad de Pance, Cali, siguen su camino de animación los Padres Luis Armando Valencia, Néstor Calderón, y Anselmus Baru. Esta comunidad está destinada al cuidado con amor y respeto a los hermanos mayores y la conforman los hermanos Raúl Villegas e Israel Rivera, y los Padres Antonio Marín, Julián Hernández y Alfredo Plaza.

Se aprovechó para compartir con la comunidad el espacio de la oración y el compartir comunitario. Como Superior Provincial, el Padre Luis Armando Valencia, aprovechó el momento para dialogar de manera personal, escuchar sus sentimientos y saber sobre su estado de salud.

En esta comunidad uno de los elementos que fortalece la vida comunitaria y misionera es la Eucaristía, por eso aprovechando la visita, se celebra la eucaristía con los hermanos, presidida por el Padre Luis Armando, quien a la luz de la lectura Lc 18,9-14, comparte la siguiente reflexión:

  • La lectura del evangelio invita a miramos sobre cómo estamos viviendo nuestra vida: en lo espiritual y nuestras relaciones con los demás.
  • El relato sobre el fariseo y el publicano nos invita a reflexionar sobre dos maneras de oración, primero según el fariseo, reflejándose como una persona perfecta que cumple todo lo que la religión indica. Y la segunda, el publicano que reconoce sus debilidades y pide perdón a Dios por lo que ha hecho.
  • Desde estas dos experiencias, se resalta la actitud de fe, sencilla y humilde, que es capaz de conocer la condición humana y dejar que Dios actúe en la vida.
  • La humildad es una virtud que permite acercarse más a Dios y a los demás y reconocer la debilidad humana.

                Este momento de la Eucaristía, también fue un momento de agradecimiento y de oración por los hermanos que hacen vida en esta comunidad, teniendo presente su vida y salud, la entrega misionera que aún siguen aportando en la misión, por medio de su testimonio de vida y de oración.

                La visita se culminó con un almuerzo fraterno. Agradecemos a nuestros hermanos que, desde sus limitaciones de salud física, siguen siendo ejemplos de la vida misionera.