
El pasado 29 de Marzo de 2025, se llevó a cabo el I Encuentro Webinar para referentes claretianos, un espacio de formación y reflexión que tuvo como tema central la «Cultura del cuidado y prevención de abusos en la Pastoral Juvenil y Vocacional Claretiana». El encuentro fue convocado por la Prefectura General de Pastoral Juvenil y Vocacional y fue dirigido por Monseñor Elías Ayuban CMF, Obispo de la Diócesis de Cubao, en Quezon City, Filipinas, desarrollado de manera virtual a través de la plataforma Zoom, reuniendo a cerca de treinta Misioneros Claretianos y algunos agentes pastorales comprometidos con la evangelización juvenil y vocacional en la Congregación.
Durante el encuentro, Monseñor Ayuban enfatizó la importancia de consolidar una cultura del cuidado en todos los espacios pastorales, promoviendo ambientes seguros y protegidos para niños, adolescentes y jóvenes. Se abordaron las principales directrices eclesiales y congregacionales de prevención y actuación frente a situaciones de abuso, destacando la responsabilidad de los referentes pastorales en la formación de comunidades sanas y transparentes.
Uno de los puntos clave tratados fue la necesidad de fortalecer los protocolos de prevención en las instituciones claretianas, asegurando una formación integral para los agentes de pastoral en el reconocimiento y gestión de posibles casos de abuso. Así mismo, se subrayó la importancia del acompañamiento y la escucha activa como herramientas esenciales para la generación de confianza y seguridad en los espacios de evangelización.
El evento también permitió un espacio de diálogo y conversación, donde los participantes compartieron experiencias e inquietudes para implementar la cultura del cuidado en sus respectivos contextos. La jornada concluyó con un llamado a la corresponsabilidad en la promoción de una pastoral juvenil y vocacional que refleje los valores del Evangelio, basada en el respeto, la dignidad y el amor al prójimo.
Con esta iniciativa, la Congregación reafirma su compromiso con la protección de los más vulnerables y la construcción de comunidades eclesiales seguras y confiables, impulsando un trabajo continuo en la prevención de abusos y la promoción de una cultura del buen trato.