Asamblea Nacional de Timoneles 2023

Después de cinco años de espera, diversas situaciones a nivel nacional y mundial, destacando una pandemia por COVID-19, el proyecto de Pastoral juvenil claretiano ANCLA, realizó un llamado buscando movilizar todas sus fuerzas: las pasadas, presentes y futuras, en un encuentro que no había sido posible desde el año 2018 en la ciudad de Barquisimeto.

            El fin de semana del 05, 06 y 07 de mayo del presente año, tuvo lugar en la localidad de Los Teques, Edo. Miranda, la Asamblea nacional de timoneles, con el principal objetivo de conocer la realidad actual del movimiento, evaluar, programar y compartir. Contó con la presencia de treinta y siete (37) anclistas, entre extimoneles, timoneles activos, próximos timoneles e invitados, provenientes de las zonas activas en el país: centro, oriente y occidente, quienes, movidos por el carisma y la pasión por el proyecto ANCLA, dedicaron estos días para conversar, soñar y proyectar un movimiento que pueda continuar navegando y llevando Cristos jóvenes para América latina.  Dentro de los objetivos del encuentro, también destacaron: brindar formación a los timoneles, hacer la revisión de los años anteriores y establecer un plan de acción para el futuro.

            Como respuesta a lo anteriormente planteado se dio a conocer que la población actual del movimiento está conformada por:

            Teniendo un total de 22 carabelas, 32 timoneles y 202 tripulantes, estando concentrada la mayor parte de la población en la zona centro del país, la cual logró crecer en el último año, dando apertura a nuevas carabelas en las localidades de El 23 de enero y El Hatillo.

            Siguiendo con los propósitos de la asamblea y manteniendo el orden anclista de primero ser, para poder luego compartir con el otro, antes de hablar de proyección, se debe hablar de formación. Es así como el tema “Organización en la pastoral juvenil” dio inicio, estableciendo que organizar es participar, y mostrando cómo a través de tres sencillas interrogantes se puede pasar de un problema y su planificación, a las soluciones y la acción.

  • ¿No existe? Hay que crearlo.
  • ¿Es defectuoso? Hay que mejorarlo.
  • ¿Va caminando? Hay que impulsarlo y dinamizarlo.

Concluyendo que “Lo que no se puede es separarse y crear acciones paralelas”, y que sin importar si las estancias de participación son en comunidades pequeñas, a nivel nacional o mundial, la meta universal es que el joven pueda encontrarse con otros jóvenes, animarse entre ellos y reconocer que no están solos.  Como espacios para promover esta integración del joven, se habló de la participación del movimiento en el ENAJÓ 2023, así como la celebración del Centenario de los Claretianos en Venezuela. Lo cual conduce a hablar del futuro, a proyectarse, y es que una vez evaluada la situación actual y con la formación necesaria para avanzar, el siguiente paso es programar.

Durante la asamblea se dio a conocer que, como objetivo del 2027 dentro de la comunidad claretiana, se encuentra la actualización, desde la cultura juvenil del momento, de los movimientos ANCLA, en Venezuela y JUCLA, en Colombia. Para lograr dicha actualización se planteó un método, buscando conectar a profundidad con la base misionera de Claret, es presentado el método apreciativo, el cual, tomando como base a los discípulos de Emaús, se fija como objetivo evaluar el movimiento a través del diálogo, conversamos en el camino, identificamos semillas de vida, oímos las llamadas de Dios y soñamos como Claret.

El método apreciativo consta de tres etapas:

  1. Conversamos, permite conocer.
  2. Soñamos, es poner la base sobre la cual vamos a proyectar.
  3. Proyectamos, planificamos los sueños.

Una vez dado a conocer el método y el objetivo que tiene, se invitó a la asamblea a conversar, a poder conectar con ese Claret, niño soñador, y, que teniendo en cuenta los mares tempestuosos que ha atravesado el movimiento, está en nosotros, guiados por Cristo, gran Timonel, acompañados por María, estrella de mar y Claret, viejo lobo de mar, trabajar porque estos casi 44 años navegando, puedan convertirse en muchos más, siendo cada día más atenta la respuesta del movimiento ante las necesidades de la juventud y que con un corazón dispuesto se atrevan a remar mar adentro.